Actividad 3: Jugando al Trivial

Todos conocemos el Trivial Pursuit. El mítico juego de mesa de preguntas y respuestas, donde el objetivo es conseguir todas las porciones llamadas quesitos. ¿Quién no se ha pasado alguna tarde jugando? La actividad que propongo es aplicar este juego al aula y conseguir que los alumnos recuerden lo aprendido a la vez que se divierten. Tengo que aclarar que esta actividad no es idea mía, sino que la pensó y la puso en práctica logo sacado de...
de manera muy exitosa mi compañero
de academia Igor.
Creo que la actividad es tal y
como la expongo, aunque
quizás el tiempo haya hecho
que haya puesto algo de mi cosecha.

El momento ideal para jugar a este juego es antes de los exámenes finales de cada evaluación. Así nos servirá para que los alumnos memoricen preguntas y respuestas que les pueden salir en los exámenes. Además, se premiará al equipo ganador con 1.5 punto para el examen de evaluación y 0.5 puntos a cada miembro del equipo que no gane, pero que haya contestado alguna pregunta correctamente.

La idea es dividir la clase en dos grupos. Cada grupo tendrá que escribir en una hoja un total de 20 preguntas de respuesta cortas diferentes. Éstas serán sacadas de los temas que entran el examen de evaluación. El profesor examinará la validez de las preguntas y que las respuestas son correctas. De manera que ya tenemos el juego casi montado. Una vez creado el escenario (cada equipo en un lado de la clase, para hacerlo más emocionante), empieza el duelo de preguntas. Se juega por turnos, cada equipo tiene sus preguntas preparadas y debe elegir quien las va a responder. Por ejemplo, el equipo A, elige a Pedro del equipo B para que responda a la pregunta X. Sólo Pedro puede responder, de manera que si acierta todo el equipo se sumará un punto. Cuando cada jugador haya respondido a una pregunta, se acaba el juego. Se suman las respuestas acertadas y el equipo con más puntos acumulados gana. En caso de empate se hace una ronda de desempate en la que pueden responder todos los integrantes del equipo. Para esta ronda se utilizarán las preguntas que hayan sobrado de la lista de 20 preguntas.

Esta actividad puede ser muy divertida si se consigue que los alumnos se impliquen en el juego. Una idea es poner un tiempo de respuesta y que entre todos se vaya dando la cuenta atrás.

Antes de cada examen de evaluación se pondrán en práctica esta actividad, en total 3 veces. Y en cada ocasión se confeccionará una lista de 20 preguntas, pero ojo las listas anteriores también se utilizarán en el siguiente juego. De manera que al final de curso contamos con que cada equipo tiene un total de 60 preguntas en su lista que pueden utilizar, y que por lo tanto habrán memorizado y aprendido. Así los chavales seguirán recordando cosas aprendidas desde el principio de curso.

Considero que la idea es muy buena. Mi compañero Igor al ponerla en práctica me comentó que los chavales se divirtieron mucho y que durante el curso no hacían más que pensar posibles preguntas “dañinas” para el equipo contrario.

Un saludo